El barrio de Cañada Real resiste

Cumplido el quinto año del corte de luz de Cañada Real, que afecta sobre todo a los sectores 6 y 5, seguimos exigiendo que se cumpla la decisión del Consejo de Europa de 11 de septiembre de 2024

Esta resolución, histórica y sin precedentes, ha dado la razón a las vecinas y vecinos, y ha condenado a España y a sus administraciones por vulnerar la Carta Social Europea. El Consejo de Europa ha reconocido que las administraciones tienen la obligación de garantizar un suministro eléctrico estable, constante y seguro, y deben poner fin al daño que el corte de suministro provoca cada día a más de 4.500 personas.

Ayer lo recordamos en un acto celebrado en Rivas Vaciamadrid, organizado por vecinas y vecinos de la Cañada, asociaciones de varios sectores, colectivos de Rivas y la Plataforma Cívica por la luz en Cañada Real.

El encuentro, que comenzó con un minuto de silencio en solidaridad con el pueblo palestino, contó con una gran participación del vecindario. Mujeres y hombres expresaron, desde la mezcla de denuncia, impotencia, esperanza y resistencia, cuál es la situación real que viven. Se recordó que el corte de luz no es casual, sino que es parte de una estrategia para forzar a la gente a abandonar las viviendas donde muchas familias llevan más de 40 años

Cañada Real es un barrio que ha reclamado durante décadas su legalización, soportando el abandono institucional deliberado, la criminalización, los derribos, los vertidos ilegales, el acoso diario de las administraciones y la especulación inmobiliaria.

Este acto forma parte de la agenda de Hábitat 24, que articula fuerzas diversas en una “Semana por la sensibilización del derecho a la vivienda digna”, por el Día Mundial del Hábitat, que reúne perfomances, charlas y protestas en distintos puntos de la Comunidad de Madrid.

Las vecinas y vecinos de Cañada, en lucha por su barrio y sus casas, reclaman que se respete el artículo 47 de la Constitución, que reconoce el derecho a una vivienda digna. Un derecho que está siendo violado en Cañada, como han condenado el Defensor del Pueblo y el Consejo de Europa. La solución debe ser participada, como exige la Ley 2/2011 de Cañada Real: rehabilitar las viviendas más precarias, ofrecer realojos dignos cuando sea necesario – preferiblemente en Cañada- y garantizar la permanencia de este barrio, que ya es un barrio más de Madrid, con más de 1.500 viviendas y más de 10.000 personas en total.

En este quinto año de acoso institucional, desde la Plataforma reafirmamos:

  • Nuestro compromiso con la unidad de acción frente al desalojo forzoso.
  • Nuestra exigencia de que las administraciones restablezcan de inmediato el suministro eléctrico.
  • Nuestro reconocimiento al trabajo de todas las personas y organizaciones que han sumado y siguen sumando esfuerzos para que Cañada Real no quede en el olvido.

Plataforma Cívica por la Luz en Cañada Real

Luz, contratos y mesa de seguimiento

Stop derribos y vertidos ilegales

Stop coacciones y acoso institucional